Sobre Artes Marciales

Estas artes no se inventaron para incrementar y reafirmar la violencia, aunque suene paradójico, son para todo lo contrario, para el autoconocimiento, para la paz y crecimiento interior, por medio del dinamismo del cuerpo, la practica del kata y la observación interior. Las artes marciales, todas, son de una misma familia. 

No importa si son artes marciales viejas ó nuevas, externas ó internas, suaves ó duras, japonesas, chinas ó de otras regiones de oriente, o si alguna difiere radicalmente en su filosofía ó técnicas.

Todas tienen sus meritos en sus arsenales técnicos, la aplicación de cada una de ellos y en los valores que aportan al físico, a la mente y al espíritu. Nunca debemos menospreciar ó hablar mal de algunas de ellas. 

Todas ellas con buenas para nosotros y nuestros entrenamientos. Si mantenemos la mente abierta, veremos en cada una de ellas aspectos diversos, que pueden nutrirnos en nuestro estudio marcial.

Una cosa es kata, kihon, kumite y defensa personal en el dojo, y otra cosa es la defensa de la vida en la calle. En este contexto las variables con otras y los ataques son reales, aquí es la vida la que esta en peligro, en estos momentos en cuando debemos actuar con todo lo que sabemos de karatedo, con la astucia propia que genera el instinto de supervivencia y con el poder de nuestro espíritu. En el dojo se entrena para ser técnico, tener buen estado psico-somático, para ser moral y cortes, para ser integro, para adquirir normas de vida. En la calle se debe seguir siendo bajo estos principios que aporta el dojo, pero sin olvidar que debemos defender la vida propia, entonces se debe actuar de una forma contundente y efectiva.

El karatedo, es un arte marcial del budo japonés, que como todo arte marcial basado en el DO (senda, camino ó vía), no debe ser utilizado al momento de aprenderlo, como una forma de demostrar que somos valientes y osados, pretendiendo ser con esto un sagaz y atrevido peleador callejero, que busca pelito solo para demostrar que sabe técnicas. Las artes marciales no están para eso, con ellas se adquiere un estado físico excelente, un comportamiento mental, moral y espiritual, frente a la vida, correcto.

El buen guerrero es aquel que no necesita luchar.

- Si te empujan, hala. Si te halan, empuja. Maestro de Aikido.

- Pensar y actuar, son uno y lo mismo. Maestro de Karatedo.

- Desconfía del guerrero que no se ríe, y del monje que no disfruta de la vida. Ciertamente se está tomando muy en serio a si mismo. Maestro Zen.

S.S. Flover Mejía

Dojo Budojokai